Palabra de OT, palabra del Señor

Ahora que OT ha encontrado su Eurovisión particular, allá por Chile, los castings siguen arrojando perlas, esta vez de mal gusto.

Pasándose por el forro de los cojones, y perdonen por la expresión, el sentido común y cualquier manual de psicología, esa Trinidad de entendidos que forma el jurado que selecciona a los que pasarán a la última prueba, ayer le soltó un consejo, no muy agraciado, a un joven un poco rellenito y que seleccionaron para ese último casting.

El consejo fue el siguiente:

“Sabes que esto es duro, tienes que tener un poco más de fondo y hacer más ejercicio.”

Y entre estertores de ansiedad, el nerviosismo y demás, el chaval respondió con un sí tembloroso, como si le contestara a Dios. Y yo pienso, ese tío, de apenas veinte años, no va a comer en un mes…; a mí me dice Carolina Ferre que tengo que hacer más ejercicio y me mato, me mato a abdominales, me mato un mes a pan y agua. Ese pobre chaval va a llegar consumido, si llega, a ese esperpento de perfiles que se está convirtiendo OT. Seguro que hasta raciona el agua. ¡Como no va a racionarla si le dijo Dios que hiciera más ejercicio para tener más posibilidades de entrar en la academia!

Pero bueno, como no quiero ser moralista (ni un santo como Al Bano, que reparte 200.000 euros entre monjitas), y La 2 tampoco, han repescado de la madrugada Los vigilantes de la playa, que a este paso va a superar a Verano azul como la serie con más reposiciones en TVE. Ahora, en las mañanas de La 2 veremos esos perfiles "made in OT" que tanto le gustan a Dios.