jueves, febrero 10, 2005

Dos documentales=Un par de hostias

Según una encuesta de la Universidad Complutense, los niños españoles que ven más televisión son también los más agresivos. Dicen, que la agresividad en la edad adolescente aumenta con el tiempo de consumo de televisión. O sea, que ver una hora más de tele al día puede provocar que los niños se vuelvan algo más violentos. Pero, ¿y si ven tres horas diarias de programas infantiles? Me explico. ¿Es lo mismo las tres o cuatro horas del Megatrix de Natalia, o de las marionetas de Lucrecia, que veinte minutos de, por ejemplo, y al azar, A tu lado? Porque claro, estaría mal que los señores encuestadores de la Universidad Complutense se pasaran por el forro variantes del estilo ¿qué programas ves en esas tres horas de tele, chaval? o ¿te enfadan más lo bailes de la triunfito Natalia o los de Carmele Marchante?

¡Que te pego, Natalia!

Hay que dejar las cosas claras, que después se sataniza el medio y ya sabemos lo que pasa. Después se mezclan churras con merinas, y resulta que cuatro horas de televisión en las que se ve el documental de la 2 de después de comer, Estravagario, Memoria de España, e incluso, algún que otro informativo, va a ser lo mismo que cuatro horas de Kilo Matamoros, que los bailes, por cierto, de la señora Marchante en A tu lado a ritmo de politonos y sonitonos, y que las charlas amenas de los colaboradores de Crónicas.

¿Y si, encuestadores de la Complutense, al niño le nace una afición incontrolable al ciclismo, y se pega, entre pecho y espalda, una etapa de siete horas, de esas que a veces la 2 programa allá por el verano? Nos tendría que salir el niño un autentico cabrón, porque siete horas de tele, son siete horas. Pero no, al final o nos sale un Indurain, o un dominguero que se embute en mallas los fines de semana mientras intenta que el culo no le sobresalga del sillín.


 A ver la tele niños

Señores de la Complutense, ¿cuántas horas de televisión dedican al día? Se lo pregunto porque se de otra universidad española que está relacionando el consumo diario de televisión con la facilidad para cometer errores a la hora de hacer encuestas.