¿Quién dijo...?

¿Quién afirmó hace una semana: “La Iglesia Católica debería apoyarnos. Somos defensores de la familia.” respecto al programa que presenta?

1) El sempiterno Jiménez Losantos, aunque no tenga nada que ver con la televisión.
2) La Campos, buscando apoyo ahora que está de capa caída.
3) Mercedes Milá, defensora de un país sin humos.
4) Bertín Osborne, más defensor de la familia que él, pocos.
5) Jorge Javier Vázquez.

Solución: Por increíble que parezca la opción 3.


Por cierto, sin que sirva de precedente, me tomo una pausa de una semana para resolver ciertas cuestiones que no tienen nada que ver con el mundo de la televisión. Sí, es eso, han acertado, me voy a hacer mirar lo de La Chilindrina.

Pájaros

-Papá, papá, ¿qué es eso? ¿Un avión, un globo, una gaviota?
-No, hijo, no. Es otro gavilán.

Información privilegiada

Atención, atención. En el programita de Emma García recurren a llamamientos de este tipo. Miren lo que ha pasado hace apenas unos minutos bajo mi pantalla:

"¿Tienes información privilegiada sobre algún concursante de Gran hermano 7? Llámanos al 905 511 005."

Al más puro estilo Lydia Lozano.

Por cierto, me arrepiento del comentario de ayer. Culpo de tantas sandeces al exceso de horas que paso viendo reposiciones de todo tipo.

Yo, confieso

Y llegó la hora. En una de esas extrañas piruetas que da el destino (ese mismo destino que reúne bajo un mismo plató a Frijolito, el señor Arús y Bustamante) me encontré con que no estaba sólo en una de mis más profundas fantasías. Señores y señoras, tras comprobar que mis gustos eran compartidos por algún que otro compañero de borracheras y "zapeos", reivindico, en público, con toda la notoriedad que puede tener dicha reivindicación en este blog (muy poquita, creo yo), a La Chilindrina como mito erótico. Ya lo he dicho.



Esta muy bien eso de alabar las bondades de la señorita Ferre, o gozar con cada noticia pasada por el filtro sensacionalista de Antena 3, pero leídas por la buena, y desgraciadamente embarazada, Lourdes Maldonado. Yo voy más lejos, reivindico a La Chilindrina como mito erótico, y lo repito para que no haya duda. Lo repito desde sus sugerentes piernas hasta su extraordinaria sonrisa de atrezzo. Lo siento, hablo por muchos que como yo han estado callados durante años: La Chilindrina me pone cachondo, al igual que cada invento de MacGyver, pero eso es otro problema.



Mañana me arrepentiré de este comentario y culparé de tantas sandeces al exceso de horas que puedo pasar viendo reposiciones de todo tipo, entre ellas El Chavo del 8. Pero a pesar del escarnio popular al que me enfrento tras confesarme, muchos vendrán detrás de mí, o por lo menos eso espero, porque comprendo lo grave de mis gustos sobre MacGyver, pero con la defensa como mito erótico de La Chilindrina tengo la sensación de no ser un incomprendido.

Y recuerden, esto sigue siendo un blog sobre televisión.

Apariencias y cubatas

La noche del sábado no sólo tuvo el momentazo de oír a Mocedades mientras una pareja de daneses bailaban breakdance. Mi ser catódico se repartió entre el inglés aceptable de Massiel y el salto al candelero de Manolo en Salsa Rosa. Y mira que no suelo ver a los chicos de Santi, pero Manolo, con esas pintas de flamenquillo ochentero y de algo más; Manolo, con esa novia a lo Ronald MacDonald; Manolo, es mucho Manolo. Y ni Massiel chapurreando inglés con aliento a JB iba a impedir que conociera un poco más a Manolo.



Y en el fondo no parece mal hombre, incluso se da cuenta de que su novia Inma, el payaso, se maquilla demasiado. Manolo no es tonto, y a pesar de parecer un cruce entre Torrente y uno de Los Chichos, Manolo es buena persona. En noches como las de ayer uno se da cuenta que las apariencias no lo son todo. Lo de Manolo me hizo pensar incluso que Massiel estaba sobria.

Pero bueno, una cosa es no guiarse demasiado por las apariencias, y otra muy distinta es pensar que Massiel no llevaba un par de cubatas ayer noche.

El momento televisivo de hoy:

Sonaba Eres tú de Mocedades en la gala 50 años de Eurovisión. El ballet danés acondicionaba el tema musical con breakdance. Repito: Mocedades y breakdance.

Medias de rejilla sacadas de una película de Tod Browning

Pensé que la medias de rejilla de la Milá, unas medias antilíbido y antitodo, iban a ser lo más duro de la noche, pero con el aperitivo de la resurrección de Valerio Lazarov como realizador de Gran hermano, sino que me expliquen esos pases a publicidad por entre el cuerpo-croma de la señora con la medias de rejilla, todo fue adentrándose en el proceloso mundo de la España habitada por "Belenes Esteban" y colchones LoMonaco.

El primer golpe, tras las medias, y perdonen tanta fijación con las medias, pero es que no se me va la imagen de la Milá cruzando muslos “enrejillados”, fue un tal Arturo, el chico de Tampico Tamaulipas, un tío capaz de hacer que un “hello” suene tan a medias de rejilla. Sólo decir sobre él, parafraseando a la certera Quintana, “que no voy a permitir a nadie dudar de su condición sexual”. Cuando el histriónico Arturo, maniático de las moscas (quién haya seguido el directo sabrá por qué), con su pijamita marca nalgas, se hundió en la casa de Guadalix, el siguiente golpe fue ver como, y perdón por lo que voy a decir, pero es que así sonó en mi salón con el beneplácito del amigo Canelaveneno, una especie de cruce entre Krusty y Fofito (algo así como el payaso de La hora chanante), marcando todo, y cuando digo todo, digo todo, apareció, quizás confundiendo la Casa de campo con el plató de Guadalix. Aunque lo mejor de Inma, está claro que hablaba de Inma, es su novio Manolo, porque si parecía que Inma transitaba por entre los paseos de ese gran parque urbano madrileño donde la gente va a practicar deporte y pasear a su perro, su novio Manolo, parecía también que volvía de allí, pero en coche (no hace falta que lo explique más).

También entró Inma, para dejar paso aun manchego más manchego que El Quijote, según él, de Tomelloso, llamado Jesús, que se divierte haciendo coreografías para el Carnaval de Tomelloso, algo también muy manchego. Surrealismo puro.

Y la noche siguió entre rejillas y pijamas, a cual más ajustado, hasta que de entre la bruma salió el friki de las cápsulas del tiempo. Un hombre cuyo objetivo vital es enterrar una cápsula cada año de aquí hasta el 2012. En el plató de Telecinco, en ese momento, creí escuchar un “¡Búscate novia!”. Pero este fanático por enterrar cosas, de nombre Tono, dio paso a Raquel. Raquel tiene un hobby. Raquel toca el violín. Raquel mantiene relaciones con mayores, relaciones de sexo. Raquel odia a los niños. Su familia no la soporta. En definitiva, Raquel tiene un problema.

Y todo parecía estar superado a esas alturas de la noche. Las dichosas medias de la Milá habían perdido todo el protagonismo ante las facultades innatas de Raquel para tocar el violín, pero, señores, cuando todo parecía en calma, escuché cosas como estas: “no hay mujeres feas, lo que hay es poco ron” y “…y yo qué hago, si soy un mangón. Me dicen el Ricky Ricón”. Y aquí fue cuando encontré en los muslos de la señora Milá algo apetecible. Aquí fue cuando vi en las “enrejilladas” piernas de la maestra de los realities un atisbo de erección mental que no he logrado definir. No sé si fue una explosión catódica después de tanto Big Brother a lo Tod Browning , o simplemente las medias de rejilla. Si es esto último, y en el fondo, muy en el fondo, me acabaron de gustar los muslos de la Milá, yo si que estoy para la parada de los monstruos de Browning.

Sólo algunas

Algunas cosas por las que me alegra pagar esta televisión pública:

1) Por el millón de euros que cobrará el señor Pepe Navarro por una temporada (13 semanas) de “Ruffus, periodista privado.”


2) Porque La 2 volverá a retransmitir carreras de caballos desde el Hipódromo de La Zarzuela de Madrid.

3) Por disfrutar de bailarines como Martín Pareja Obregón.

Product placement lo llamaban

Tengo unos cuchillos marca Arcos; una jarra Brita; utililizo aceite de oliva Carbonell; tengo una batidora, horno, microoondas, olla a presión, vitrocerámica y nevera Fagor; suelo comprar queso Gran Capitán y vinagre Louit.

La verdad es que no sé por qué utilizo estas marcas.

Todos a bailar

Como el instituto de secundaria de Arroyomolinos sigue sin recomendar este blog en sus guías escolares, sólo me queda ver al señor Martín Pareja Obregón, nuevo profesional del mundo de los realities. Y encima bailando.



Perdonen tanta tristeza, pero ese hombre me puede más que Romay bailando. Entre esto y el cambio a las mañanas de El auténtico Rodrígo Leal, ficción de gran factura (espero que se note la ironía), estoy de capa caída. En días como estos, con un resacón a lo ¡Mira quién baila!, uno sólo puede consultar esa guía escolar en la que no recomiendan este blog. Sólo por ver si recomiendan algo más interesante…

Polonia = España

Ya que tenemos a nuestra Oprah un poco chuchurrida, que mejor que saber que el producto nacional se exporta a los confines de medio mundo, aunque ese medio mundo se llame Polonia. Y es que el formato ¿Qué apostamos? está dejando el nombre de España en alta estima allá por donde va. Un hecho que hace que Polonia se parezca más a esa España de finales de los ochenta y principios de los noventa: Inflación, paro, recién incorporados a la U.E, permanentes, hombreras, y programas como el ¿Qué apostamos? O sea, igualitos.




Por cierto en polaco se llama Zaloz Sie.

SuperOprah

Dentro de poco en Estados Unidos será Oprah Winfrey quien tenga la última palabra a la hora de ajusticiar a un condenado a muerte (“Le llaman alcaide / ¿El gobernador? / No, es Oprah, dice que paremos la ejecución.”) porque su poder e influencia están llegando a un punto un poquito, como lo diría, acojonante, con perdón.



Ahora resulta que a la Juana de Arco afroamericana le ha dado por ir detrás de los sospechosos de pedofilia, y en un programa titulado “La lista de depredadores de niños” ha ofrecido 100.000 dólares a quien de pistas que ayuden a encontrar a estos sospechosos, que recuerdo son supuestos abusadores, repito, supuestos abusadores. Unos “supuestos” que tras pasar el filtro de Oprah, y conociendo el sistema de jurado norteamericano, son ya culpables: “Si lo dice Oprah”. Porque Oprah, para aquellos que no la conocen, aunque es difícil no conocerla, no en vano su show lo ven en 112 países (eso es como una Ana Rosa mucho más mediática), es muy, pero que muy influyente en los USA. Para hacernos una idea, recuerden a la Campos en su buena época en Telecinco, con su gran imparcialidad, marcaba quien seguía o quien se iba de Gran Hermano. Pues Oprah hace eso con algo más que un simple formato televisivo. Y si encima te da 100.000 dólares.

No me imagino a las Campos ofreciendo compras gratis en el Caprabo por cada buena pista. Porque esa es otra, Oprah, está mucho más forrada.

Los carga el diablo

Bueno, me voy a mosquear la próxima vez que escuche que alguien me dice que en este país hay, exceptuando a las públicas, tres canales generalistas, o sea, Antena 3, Telecinco, y los dos arroces que le quedan al Plus. Después dirán que me meto mucho con la cadena de Fuencarral, pero de generalista nada. Como no tenían suficientes programas de zapping, van y la cascan. ¡Otro más! ¡Viva la televisión generalista que pasa de ser generalista! ¡Viva Telezapping! ¡Viva!



Perdonen que me muestre eufórico, pero estamos viendo el germen de un nuevo planteamiento de marketing televisivo. Mientras la pública se convierte en Teleculebrón, que hasta Los Lunnis tienen ya acento venezolano, Telecinco se pierde en los vericuetos de hacer resúmenes de resúmenes de resúmenes…

Me pregunto si llegará un momento en que tendrán que recurrir a los propios programas de zapping para seguir resumiendo la semana. Algo así como un metabatiburrillo o metazapping. Imagínense: "¡El zapping de los zappings! Zapping total, el programa definitivo que no sólo resume lo más destacado de la semana, sino que también resume lo más destacado de todos los programas que resumen lo más destacado de la semana." ¡Uff!

Como diría mi abuela: "Los programas de zapping los carga el diablo."

Ser heavy y ver OT

Lo reconozco, no fui uno de los seis millones que vieron la final de OT, y eso que como dice un amigo, "hasta los heavys ven OT".



Otra vez será.

¡Cantare!

Cómo sigue el patio. Ahora es Telecinco quien se desmarca de Gestmusic. Deberían haber programado OT a la misma hora que Pasión de gavilanes, por eso del culebrón.

Buceando en el caso Idaira, que ya suena a Audiencia Nacional, he encontrado un artículo interesante, que dice quizás lo que muchos pensamos. Por eso, link al canto.

Y parió la abuela

Cómo está el patio. A Gestmusic y a Telecinco se les tiran al cuello. Ahora es la Asociación de Usuarios de la Comunicación la que se queja ante Industria (sí, sí, como lo oyen) de la expulsión de Idaira. Y esto tiene pinta de ir para largo…

Station 3

Para los despistados, esto sigue siendo un blog sobre televisión.

Quiero una tituladora para poder hablar de bragas y escabeches

Hoy lo he decidido. Le voy a pedir a los Reyes Magos una tituladora, una de esas maquinitas que juegan con la infografía de un programa de televisión titulando cosas, o poniendo declaraciones entrecomilladas del estilo de: Paco: “Llevo sin ver a mi madre 30 años”.

Una tituladora, queridos Reyes Magos, es el regalo definitivo. Cuántas cosas se podrían hacer. Además, no me vale el “no están a la venta”, porque creo que las venden en algún lugar, y si no, que me expliquen ese titular bajo el busto de Iván (La Casa de tu vida) en que se leía:

“Sandra vuelve, las bragas eran de mi madre”

Y aquí es cuando tendría que tener celos del tío que tiene su tituladora conectada a A tu lado y no pensar en las bragas de la madre de Iván. ¡Macho! Dime dónde compraste tu tituladora. Me imagino poder llenar de frases entrecomilladas los bustos catódicos de algunos. Hoy, por ejemplo, después de decidir lo que quería para Reyes, le hubiera puesto al promocional Santiago Segura, que iba de promoción, como no, a la cocina de José Andrés, un:

Segura: “Me gusta que me la pelen…, la caballa, que me pelen la caballa.”



La verdad es que, con tituladora o no, el pobre José Andrés, otro al que le ha abandonado el aceite, que preparaba una estupenda caballa en escabeche, no le sentó nada bien que el hombre a una camisa de Torrente 3 pegado, se "la pelara" tanto su menú.

Pobre horario infantil. Pobre Caffarel, cuando pone un programa de cocina a media tarde sin violencia, sin sexo, y sin palabrotas, le viene el amiguete Segura y le dice a la audiencia, entre olores y escabeches, que le gusta que se la pelen. Mejor será que no vaya de promoción a Los Lunnis, porque entonces, si ya he conseguido mi tituladora, los entrecomillados…

Mozart y Paco Porras: genios precoces

Ahora que ya no vale de nada contestar en el trivial 8.848 metros, qué más da si Paco Porras dice cosas en I love zapping como: “Yo, con 5 ó 6 años, daba conferencias”.

Bueno, pensándolo mejor, qué más da Paco Porras.

Un domingo cualquiera

(Fórmula Uno x 2) + Programas de zapeo = Un domingo cualquiera en Telecinco.

Tarde, muy tarde

No voy a echarle la culpa a los manoseos de Terelu al señor Estrada. Tampoco, al cambio de aceite del amigo Arguiñano (algo que, sinceramente, me ha afectado mucho; no sé como le voy a decir a mi botellita de Hojiblanca que ya no voy a contar más con ella). Y menos voy culpar a esa sección bodeguera, y falta de gracia, que es “El blog de María Teresa”, una especie de monólogo cutre de la antigua señora de las mañanas, guionizado, que utiliza un portátil de atrezzo para dar sensación ¡de blog! No, no voy a echarle la culpa a ningún fenómeno televisivo de mi penosa tardanza a la hora de abrir otra vez elparaguas. Por supuesto, ni siquiera he tenido 3 meses de vacaciones como alguien me ha insinuado. Y a pesar de que algunos piensen que ha sido mi gasto en llamadas al 806 y mensajes al 5557, para que una tía que desafina ganara OT (que no ha surgido efecto), lo que me ha impedido seguir pagando mi conexión a internet religiosamente, en realidad, mi falta de credibilidad no tiene ninguna justificación.

Pero como lo hecho, hecho está, les recompenso con un pequeño cambio de look. Un cambio que seguirá dando problemas varios días, y que ha sido posible gracias al señor Canelaveneno.

Todos los perdones del mundo, y otra vez a ponerse las pilas. Por cierto, ya me contarán que les parece esta pequeña remodelación de fachada.

P.D: El nuevo aceite de Arguiñano es Carbonell.